Correa acusa a la FIA de dar «soporte cero» tras accidente fatal de Hubert en la F2

De regreso a la F2 y a cuatro años del accidente fatal de Anthoine Hubert, Juan Manuel Correa agradeció el apoyo de amigos y familiares durante su etapa de recuperación, pero criticó el soporte "nulo" por parte de la FIA.

Juan Manuel Correa se enfrentó el 31 de agosto de 2019 a uno de los momentos más traumáticos de su vida. Fue cuando el auto del piloto de origen ecuatoriano se estrelló contra el de Anthoine Hubert a 218 km/h durante la carrera principal de la Fórmula 2 en el circuito de Spa Francorchamps, Bélgica. Con el impacto, el francés de 22 años falleció, mientras que Correa llegó a estar en coma inducido.

Hoy Juan está de vuelta en la parrilla de la F2 con la escudería Van Amersfoort, pero no oculta que aún lamenta la falta de apoyo de la FIA (Federación Internacional del Automóvil) en el momento del trágico accidente. El piloto nacionalizado estadounidense también se fracturó las dos piernas y los pies, además de sufrir una contusión en la espalda.

«Estaba solo», declaró en una entrevista con el podcast Track Limits. «Tenía a mi familia, mis amigos, mi equipo, pero el apoyo de la FIA fue nulo. Eso fue muy malo, para ser honesto, fue triste, muy triste. Casi me sentí un poco utilizado, en el sentido de que cuando estás dando un buen espectáculo, ellos están ahí y son los primeros en beneficiarse de ello», disparó.

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Juan Manuel Correa recibió en el hospital la visita de Alex Albon, por aquel entonces piloto de Red Bull. (Foto: Reproducción)

Tras el accidente, Correa llegó a culpar a la entidad de negligencia, afirmando que la falta de información de quién le prestó la primera atención lo llevó a tener una drástica complicación de salud cuatro días después del impacto. La FIA, sin embargo, refutó las declaraciones y aseguró que hubo un «monitoreo constante».

«No quiero insistir mucho en eso porque hay un conflicto de intereses y estoy corriendo allí de nuevo, pero había un poco de esa sensación, y sólo puedo decir que tuve mucha, mucha suerte en la gente que tenía al lado ayudándome. Porque no había el sistema de apoyo que debería haber habido», continuó el piloto de 23 años.

«Creo que entendieron pocas cosas desde mi accidente, tuve algunas conversaciones con ellos al respecto. A veces no es fácil cambiar una gran organización. Pasan muchas cosas. Lo que les diré es que si mañana alguien tiene el mismo accidente, estaré a su lado como nadie lo ha estado conmigo. Porque sé lo que necesitan y lo que les falta», finalizó Correa.