¿Por qué la estrategia de Hamilton no funcionó en el GP de Turquía?

Lewis Hamilton pensó en una estrategia para alcanzar el podio en el GP de Turquía, luego de comenzar relegado por una sanción al cambiar componentes de su motor, Sin embargo, su plan falló, y el británico debió consolarse con el quinto puesto en la carrera.

Durante el GP de Turquía del pasado domingo, Lewis Hamilton se enfadó con Mercedes después de parar en boxes y poner neumáticos intermedios nuevos, maniobra que le hizo perder ritmo y un lugar en el podio. Sin embargo, la comunicación por radio entre el británico y su equipo demostró que el piloto no quiso hacer su parada cuando fue llamado por su ingeniero, y fue esta decisión la que afectó a sus posibilidades de terminar tercero. Un día después, tras analizar el resultado, el británico negó estar enfadado con sus compañeros de escudería.

Luego de haber largado 11º, Hamilton consiguió escalar hasta el 5º puesto. Los pilotos que lo precedían empezaron a entrar en boxes para cambiar neumáticos en la vuelta 36, y el británico fue llamado cinco vueltas después. Sin embargo, prefirió quedarse en pista. Hamilton imaginó que la pista se secaría y que sería necesario un nuevo juego de slicks. De esta forma, todos tendrían que volver a parar. Lewis buscaba una ventaja estratégica y quería estar en posición de entrar a boxes sólo una vez para cambiar su compuesto.

¡Conoce el canal de Gran Premio en YouTube!
¡Sigue a Gran Premio en Twitter y en Instagram!

En un principio, Lewis Hamilton fue llamado a cambiar sus neumáticos, pero el británico desoyó la orden. (Foto: Mercedes/Sebastian Kawka)

Los pilotos que cambiaron a un nuevo juego de intermedios tuvieron problemas al llevar el neumático a la pista y perdieron agarre. Sin embargo, con el correr de las vueltas las ruedas se iban adaptando mejor a la pista y los tiempos empezaban a bajar.

El piloto de Mercedes pasó a intentar superar a Sergio Pérez, que se defendía bien. No obstante, no lo consiguió y perdió 5s con los líderes. Entonces, Max Verstappen, compañero de equipo de ‘Checo’, fue llamado por la escudería austriaca, ya que el tiempo perdido por Hamilton sería suficiente para que el holandés se detuviera y volviera a la pista delante del siete veces campeón. Y eso es exactamente lo que ocurrió.

Lewis Hamilton también protagonizó una intensa lucha con Sergio Pérez. (Foto: Mercedes/LAT Images)

En este punto, la estrategia de Hamilton ya era complicada. Incluso le pidió a Mercedes que lo llamara antes de que Pérez vaya a boxes, buscando un undercut. Sin embargo, el piloto mexicano se detuvo en la siguiente vuelta y descartó esta posibilidad. Así, en la tercera posición, el británico sólo pudo mantenerse en pista y esperar a que se secara. Una parada acabaría con sus posibilidades de alcanzar el podio.

Sin embargo, Mercedes percibió de que no sería posible completar la carrera con el mismo juego de neumáticos, algo que solo consiguió Esteban Ocon. Hamilton, en cambio, seguía creyendo en la posibilidad y prefería seguir en la pista. Esto duró hasta la vuelta 50, cuando Mercedes advirtió al piloto que sería su última oportunidad de parar y poder terminar delante de Pierre Gasly. Hamilton, todavía incrédulo de que esta fuera la mejor opción, respondió a la llamada y entró en boxes, poniendo neumáticos intermedios.

Lewis Hamilton negó estar enfadado con los ingenieros por la falla en la estrategia. (Foto: Mercedes)

Sin embargo, fue durante su vuelta a la pista cuando el piloto empezó a perder rendimiento, ya que mientras Gasly ya había superado la fase adaptación de los neumáticos, con 14 vueltas en su juego, Hamilton luchaba por la adherencia y perdía cada vez más tiempo, viendo al francés cada vez más cerca y exponiendo su enfado a través de la radio. Según el propio piloto, su frustración se debió a que podía aspirar a ser segundo y de repente se encontró quinto. Sin embargo, fue la propia decisión de Hamilton de no escuchar a Mercedes y mantenerse en pista lo que le hizo perder posiciones.

Tras el cierre de la carrera, con Bottas primero, Verstappen segundo y Pérez tercero, el jefe de Mercedes, Toto Wolff, admitió que la estrategia no funcionó. Si Hamilton hubiera parado junto a los autos de Red Bull, podría haber mantenido la misma distancia con sus rivales e intentar una superación. El británico buscó una ventaja estratégica, y esta vez no funcionó.

Con el segundo puesto en Turquía, Max Verstappen recuperó el liderazgo del Mundial de Pilotos, con seis puntos de ventaja sobre Hamilton, que tendrá seis pruebas más para intentar buscar su octavo título mundial. Sin embargo, con Red Bull neutralizano cada acción en la pista y Mercedes yendo en solitario, el holandés está cada vez más cerca de su primer conquista.

La Fórmula 1 volverá a la acción el 24 de octubre en Austin, para el GP de Estados Unidos.