Busch reconoce haber sido detenido en México por portación de arma de fuego

De nuevo en la Nascar en 2023, Kyle Busch tuvo un fin de semana festivo muy agitado y fue detenido en México tras ser sorprendido con un arma. El conductor explicó la situación a su regreso a EE.UU.

El piloto de Nascar Kyle Busch confesó que fue arrestado por portar un arma durante unas vacaciones en Cancún, México. Confirmó además que el operativo fue llevado a cabo por las autoridades locales tras haber sido sorprendido con dicho objeto y «aceptar su castigo. El piloto estadounidense ya se encuentra de nuevo en su país y si bien posee permiso para portar armas, reconoció que desconocía la ley mexicana antes de viajar al país.

«A finales de enero, Samantha y yo disfrutamos de unos días de vacaciones en México. Cuando salía del país, el arma de fuego fue interceptada durante un registro rutinario en el aeropuerto», declaró Busch. «Tengo un permiso válido de portación oculta de las autoridades locales y sigo todas las normas sobre armas, pero cometí un error al olvidar que estaba en mi mochila», admitió.

«El hallazgo del arma condujo a mi detención mientras se resolvía la situación», reveló. «No conocía las leyes mexicanas y no tenía intención de introducir un arma en México. Cuando se descubrió, cooperé plenamente con las autoridades, acepté los castigos y regresé a Carolina del Norte», subrayó.

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KYLE BUSCH; NASCAR; KANSAS;
Tras la situación en el aeropuerto, Busch ya se encuentra en Estados Unidos (Foto: Nascar)

Según los primeros informes de las autoridades locales, el 27 de enero se detuvo a un hombre, identificado como Kyle Thomas B, tras hallarse en su poder un arma de fuego con balas de punta.

«Pido disculpas por mi error y agradezco el respeto mostrado por todas las partes mientras resolvíamos el asunto», continuó Kyle. «Mi familia y yo consideramos este asunto resuelto», concluyó el piloto de Nascar.

A pesar de considerar el asunto «resuelto», Kyle aún tendrá que rendir cuentas ante la justicia mexicana, al menos en teoría. Según las autoridades locales, el conductor estadounidense fue condenado a tres años y medio de prisión, así como a una multa de 1.100 dólares. Como el piloto ya está de vuelta en Estados Unidos, aún no está claro cómo cumplirá su condena.

Polémica aparte, Busch se prepara para un nuevo reto en la Nascar en 2023. El piloto de Las Vegas puso fin a su compromiso con Joe Gibbs a finales del año pasado y comenzará una nueva etapa con Richard Childress a partir de esta temporada, cuyo inicio está previsto para el 19 de febrero con las 500 de Daytona.